GUÍA DEL ABOGADO PARA SUPERAR CON ÉXITO LOS DESAFÍOS DEL 2021
Muchos abogados se preguntan cómo el 2021 afectará al ejercicio de su profesión. Cuando me preguntan por ello, lo primero que les digo es que va a ser un año interesante para todos aquellos que sepan aprovechar las oportunidades de la digitalización.
Durante el 2020 todavía he podido apreciar cómo, citando a Jesús María Boccio, “muchos abogados iban paseándose tranquilamente por la orilla de la playa sin darse cuenta de que la primera ola del tsunami la tenían delante y que esta ola es la ola tecnológica”.
No obstante, como dije en la anterior publicación, “la COVID-19 ha puesto de manifiesto, la importancia y bondades de la digitalización en nuestro día a día y especialmente en nuestra forma de trabajar”.
En el 2020 hemos podido comprobar cómo, estando más aislados que nunca, confinados en casa en una situación de vulnerabilidad e incertidumbre desconocida hasta la fecha, internet y las TICs han sido nuestro gran aliado consiguiendo quitarle dureza a una situación para la que no estamos preparados.
Las videollamadas no solo han sustituido a las llamadas tradicionales, sino que han sustituido el contacto, el tocarse.
CAMBIO DE PARADIGMA
Para los que no somos nativos digitales probablemente nos cueste algo más aceptar cómo pequeños robots se han colado en nuestras vidas imitando una serie de procesos que consideramos como complejos, inteligentes y exclusivos del ser humano. Aunque parece que lleven con nosotros toda la vida, la realidad es que la irrupción y popularización del smartphone y de las TICs data de la década del 2010.
Actualmente en España hay más de 54 millones de suscripciones de móvil (el 117% de la población) y más de 43 millones de usuarios de internet (el 93% de la población).
Este fenómeno en paralelo con el desarrollo y acceso a internet vía wifi o redes le han permitido al consumidor de servicios jurídicos tener el poder de la información en la palma de su mano.
Internet ha supuesto una re-evolución en cuanto la relación abogad@-consumidor. La red se está apropiando de todas las partes de nuestro cotidiano y está integrando todas nuestras necesidades. Ya no es un elemento más o parte de lo que somos o hacemos, sino que se ha convertido en un elemento vehicular que une a todos y a todo permitiendo al consumidor de servicios jurídicos:
- INFORMARSE: Internet se ha convertido en la fuente de sabiduría a la que acude el consumidor de servicios jurídicos para cubrir sus necesidades informativas y/o de consumo.
- ESTAR HIPERCONECTADO: Desde que el consumidor de servicios jurídicos se despierta hasta que se acuesta está a su alcance un dispositivo con conexión a Internet que le facilita toda la información que requiere.
- SER 24x7x365: En cualquier momento el consumidor de servicios jurídicos tiene la posibilidad de buscar, consultar, comprar, opinar… Ya no hay horarios para el consumidor y los abogados deben ser conscientes de ello.
- INFLUIR: Escribir un comentario o subir un vídeo está al alcance de todos los internautas. Esos contenidos pueden referirse, en ocasiones, a la experiencia del consumidor de servicios jurídicos con determinados abogad@s.
FACTORES CLAVES PARA SUPERAR CON ÉXITO LOS DESAFÍOS DEL 2021
Este impacto de la tecnología en el comportamiento del consumidor de servicios jurídicos, sumado al de la COVID-19 en términos socioeconómicos, auguran un 2021 tan digital como desafiante.
Todas las voces autorizadas (empezando por el Sr. Bill Gates que advirtió en el 2015 sobre el riesgo de un virus mundial a imagen y semejanza del que nos ocupa ahora) indican que este año, a pesar del gran avance científico logrado con el desarrollo de las vacunas, todavía no estamos fuera de peligro.
En consecuencia, mucho me gustaría equivocarme, pero me temo que en el 2021 vamos a seguir conviviendo en cierta medida con el uso de la mascarilla y las recomendaciones de distanciamiento social dictadas por el Gobierno y las autoridades sanitarias para frenar la expansión de la pandemia.
Para ayudar a los países miembros a afrontar los nefastos estragos que la pandemia está generando en sus economías, el pasado 21 de julio de 2020, la UE acordó un plan de recuperación y un presupuesto europeo a largo plazo en el que España debería contar, entre el 2021 y el 2027, con 140.000 millones del fondo de recuperación europeo.
En cualquier caso, indicadores invitan a un prudente optimismo respecto del 2020 y que avisan al abogado de que deberá tomar medidas correctoras para superar con éxito este cambio de paradigma.
FACTOR 1: INTERNET
Antes los abogados controlaban la comunicación.
Mucho antes controlaban la oferta.
Pero ahora el consumidor elige.
El comportamiento del consumidor de servicios jurídicos ha cambiado. Vivimos en la era digital y no estar en La Red no es una manera de singularizarse, sino más bien una de quedarse en desventaja frente a los demás. El consumidor de servicios jurídicos espera que cuando busque “abogado” en internet, este aparezca sin más y que, por tanto, tenga una presencia online con la que cubrir sus necesidades informativas y/o de consumo. Para el abogado que no se ha preocupado por Internet, simplemente será una oportunidad perdida.
Marketing Digital
“El arte de la estrategia es el camino a la seguridad o a la ruina” (Sun Tzu)
El Marketing Digital es la aplicación de las estrategias de comercialización llevadas a cabo en los medios digitales. Una evolución radical de los conceptos tradicionales del marketing con objeto de satisfacer las necesidades de consumo ante un cliente cada vez más digitalizado, proactivo, curioso, exigente e impaciente.
Con más de la mitad de la población mundial en línea, la capacidad del abogado para conectarse con los consumidores de servicios jurídicos (potenciales clientes) está determinada en gran medida por la fuerza de su estrategia de MARKETING DIGITAL.
Marca Personal Digital
“Hay exceso de profesionales commodity, con alta preparación, baratos, sustituibles, homogénos e indistinguibles.”
El Branding Personal es el proceso de descubrimiento, desarrollo y comunicación de la Marca Personal para transmitir lo que te hace relevante para otros. Al igual que en el mundo físico, es importante labrarse una buena reputación, crear una imagen de marca convincente, y abrir un escaparate que atraiga a posibles clientes que buscan en la Red a su profesional ideal.
Hoy Internet pone a nuestra disposición herramientas para crear una Marca Personal Online que nos ayuda a posicionarnos como un profesional que debe ser tenido en cuenta.
Posicionamiento en Buscadores
¡No se puede comprar aquello que no se conoce!
Teniendo en cuenta que más del 85% de la población española utiliza Internet de forma regular, estamos hablando de más de 39 millones de personas utilizando buscadores como Google para localizar la solución a sus problemas y sí, entre ellos la solución a sus problemas legales.
Ya nadie cuestiona que Google se ha convertido en el principal motor de búsqueda de información, ¡y la búsqueda de abogados no es una excepción!
Pero ¿cuántas veces revisamos la tercera o cuarta página de resultados de Google? Por muy buena marca personal que tenga el abogado en internet, si no está en el Top de Google es invisible a los ojos de sus potenciales clientes. Esta es la razón por la que el SEO, posicionamiento natural en buscadores como Google es tan importante, el “ser o no ser” para que el consumidor de servicios jurídicos sepa de la existencia del abogado en Google.
Reputación Online
“El hecho de que yo tenga tanto poder en términos de números con Facebook, Twitter, Instagram, etcétera, me ayudó a ganar todas estas elecciones en las que mis rivales gastaron mucho más dinero que yo”
(Donald Trump, presidente de los EEUU)
La reputación que tenga el abogado en internet va a afectar su posibilidad de captar clientes.
Hoy día la gente comenta lo que quiere en redes sociales, foros y otros blogs y su poder de influencia es mucho ya que son pocas las personas que comprueban la veracidad o no de estos comentarios. Lo bueno es que se puede controlar en cierta medida los resultados, al menos los primeros que son los que más se ven. No te quedes atrás y toma el control en tus acciones para que tengas las reacciones que buscas del mercado y las personas.
FACTOR 2: INTELIGENCIA EMOCIONAL
En 2021 generaremos un 65.900 % más información que toda la generada por la humanidad hasta el 2003.
Hasta 2003 la humanidad había generado 5 exabytes de información a lo largo de toda su historia.
Cuatro años más tarde, en 2007 se generaron 281 exabytes, en 2017 1.464 y se espera que en 2021 alcancemos los 3.300 exabyte (EB).
A modo de ejemplo, si el Código Penal en PDF ocupa 14 MB, 3.300 EB equivaldrían a 236 billones de Códigos Penales, 660.000 millones de discos Blu-ray de 50 GB cada uno, 330 millones de discos duros de 1 TB, 33 millones de cerebros humanos, 132.000 super computadoras con 250 petabytes cada una y 73 gramos de ADN.
Inteligencia Artificial, Big Data, Deep Learning, … y Google:
"El Abogado Robot"
¡Ya existen tecnologías capaces de resolver cuestiones jurídicas, de momento básicas, mejor, más rápido y barato que lo haría un abogado.!
Antes de la irrupción de internet, el consumidor de servicios jurídicos no tenía más opción que acudir al abogado para satisfacer sus necesidades informativas y/o de consumo.
Con la llegada del “abogado Google” el consumidor de servicios jurídicos tiene el poder de la información a golpe de clic. Google se ha convertido en la fuente de sabiduría a la que acude en primera instancia el consumidor de servicios jurídicos motivado por la inmediatez y la gratuidad del servicio.
Ante este escenario, los abogados que en el 2021 destaquen por su alto grado de especialización y sus habilidades emocionales dispondrán de una importante ventaja competitiva con objeto de minimizar la amenaza de una progresiva y silenciosa invasión de sus competencias por parte de la máquina.
FACTOR 3: DIGITALIZACIÓN
¡El futuro presente es digital!
El 10 de abril de 2020, mientras la mayoría de las publicaciones competían en analizar y/o comentar el “baile” de números que todos los días el Gobierno daba en términos de personas infectadas, curadas o muertas consecuencia de la COVID-19, publiqué la siguiente reflexión:
“El COVID-19 es la tormenta perfecta, para implantar definitivamente un cambio de paradigma en materia de Recursos Humanos … es la excusa perfecta para implantar por parte de las grandes empresas el teletrabajo, reducir sus costes estructurales, ajustar sus plantillas, monitorizar la productividad de sus empleados y por ende mejorar sus ratios en términos de rentabilidad. La COVID-19 ha conseguido que el trabajador vea el teletrabajo ya no como un “capricho de los de RR.HH.” sino una “razón de fuerza mayor”.
5 meses después de esta publicación, el Ministerio de Trabajo y Economía Social confirmaba mi pronóstico logrando aprobar la nueva Ley del Teletrabajo tras llegar a un acuerdo con empresarios y sindicatos.
Dentro de este contexto de cambio de paradigma, la evolución natural de los despachos de abogados a “la nueva normalidad” pasa inexorablemente en el 2021 por la integración del teletrabajo y por ende la digitalización de sus estructuras.
El abogado 5G
¡Con un consumidor de servicios jurídicos cada vez más digitalizado y proactivo,
satisfacción inmediata es absolutamente crítica!
Desde una perspectiva de velocidad máxima, el 5G es 20 veces más rápido que el 4G. Esto significa que durante el tiempo que se tarda en descargar una sola pieza de datos con 4G, la misma podría descargarse 20 veces a través de una red 5G.
En España, a finales del mes de febrero de 2018, el Ministerio de Economía y Empresa comenzó la licitación de las primeras frecuencias de 5G, iniciando así un progresivo proceso de transformación digital. En 2020 los principales operadores de telefonía móvil han trabajado por posicionarse al respecto ofreciendo cobertura 5G a sus clientes, aunque con limitaciones todavía respecto de su potencial.
El acceso a esta nueva tecnología permitirá a los abogados capaces de integrar dentro de su estructura de despacho las ventajas de soluciones como la videollamada/videoconsulta (comunicaciones online), la firma electrónica certificada, la entrega certificada, la identificación electrónica, el pago online, el registro de tareas, los expedientes digitales, la reserva de cita previa, ... mejorar sustancialmente la propuesta de valor al cliente.
FACTOR 4: UNIÓN
En el 2019 Amazon lanzó en USA una IP Accelerator para ofrecer servicios legales en materia de protección de marcas. Quién sabe si después de la Propiedad Intelectual, vendrán otros proyectos de asesoramiento “en masa” o en otros ámbitos legales.
De momento lo más sensato es pensar que lo pueden hacer y lo han hecho para un consumidor de servicios jurídico muy concreto. El “qué, cómo y cuándo” vendrá seguramente influenciado por el resultado de esta “prueba piloto” en USA.
Amazon y Google:
"El abogado Google/Amazon"
“Ahora, no sólo compito con otros bufetes, sino también con Google o Amazon”
(Gideon Moore, presidente mundial de Linklaters)
Para las firmas de abogados globales, una probable irrupción en el mercado legal de estos gigantes tecnológicos ofreciendo servicios legales en masa tendría unas consecuencias minimizadas principalmente gracias al poder de su marca corporativa, su grado de superespecialización y su cobertura mundial.
No obstante, para los abogados independientes o con estructuras despachos tipo “boutique” que operan en un mercado local, una probable entrada en escena de estos marketplaces representa una amenaza a su propia libertad, obligándoles a ajustarse a sus draconianas normas y volviendo a todos los abogados exactamente iguales de cara al consumidor de servicios jurídicos online.
Conscientes de lo que está en juego para los abogados, en UNAES trabajamos con objeto de ofrecerles un contrapunto a la posición de fuerza que los GAFAM (Google – Amazon – Facebook – Apple – MICROSOFT) ejercen en el mercado y sus consecuencias en términos de LIBERTAD.
Colaboración:
Unión de abogados
¡Únete y no estarás sólo!
Como consecuencia de todo lo anterior, la colaboración entre abogados no es una opción es una necesidad.
Articulada como una red de Abogados Especialistas UNAES facilita y anima a la comunidad de juristas que la integran a centrarse en enfocar su mentalidad hacia los beneficios y no hacia los inconvenientes de derivar clientes, compartir información, formar relaciones empresariales, crear y/o desarrollar oportunidades de negocio, …
Se trata de una filosofía de entender la profesión en un entorno global y digital cada vez más exigente y competitivo. Un cambio cultural que, junto con los anteriores factores, una vez interiorizados van a permitir al abogado ver su actitud recompensada en términos de reputación, crecimiento profesional y lo más importante, una mayor cartera de clientes en los años venideros.
FACTOR 5: ESFUERZO
¡El trabajo duro vence al talento, cuando el talento no trabaja duro!
Por último, otro factor clave que, por obvio puede pasar desapercibido, tiene que ver con la capacidad de trabajo del abogado para afrontar los retos a los que se enfrenta su profesión en materia de digitalización, especialmente, los efectos en satisfacer las necesidades de un consumidor de servicios jurídicos cada vez más digitalizado, proactivo, curioso, exigente e impaciente.
Trabajo, trabajo y más trabajo
¡Ser un trabajador incansable!
Para los grandes despachos que trabajan con presupuestos de cierto volumen, la inversión en nuevas tecnologías y en el posicionamiento de sus perfiles web es algo ya consolidado.
Sin embargo, los abogados independientes o con estructuras tipo "boutique" han dejado de lado esa faceta, llevados por el estrés del día día del trabajo.
Este escenario, requiere que el abogado duplique sus esfuerzos, dedicando horas extras de trabajo al aprendizaje, no solamente de las últimas novedades jurídicas sino también, de las últimas novedades en materia de Marketing Digital.
Conscientes de la dificultad para el abogado de conciliar el trabajo de despacho con el aprendizaje y la práctica de estrategias de Marketing Digital (al tratarse de un ámbito ajeno a su profesión, extremadamente hostil y cambiante), UNAES nace con voluntad de suplir esa carencia, unificando a abogados especialistas en cada una de las materias más importantes del derecho en toda España y dándoles la relevancia que se merecen en el mundo digital.
Artículo escrito por Sandro GARCIA, Socio Fundador y CEO de UNAES